Silencios Del Alma

Dejar que los sueños fluyan a la par con mis emociones son los fines de este blog; Donde a la vez, intento descifrar los secretos de ese interior que a veces nos confunde, nos envuelve y nos atrapa. De ese mundo real que no es real; de ese camino correcto que es un precipicio, y de esa vida que tal vez no es vida, sino muerte. Aquí solo quiero nadar entre mis nostalgias y hundirme en el abismo que dejan los silencios de mi alma.

Nombre: Carola

20 febrero, 2006

Quiero Que Desangre Este Amor Que Aún No Muere







Que dificil es poder ser feliz. Que difícil es poder encontrar el camino de la felicidad y sumergirme en el abismo de los sueños, de las sonrisas, de las magicas fantasias, y de los paisajes que adornan la vida.

Por qué siempre llegara la maldita noche, donde tus recuerdos reaparecen como almas tormentosas que golpean mi alma, hiriendo mi vivir?

Cuándo podre, por fin, dejar esos espiritus salvajes que día a día retienen mi vida como si de ellos fuera; que día a día desgarran de mi alma toda la esperanza de ser feliz, y que día a día quitan fuertemente de mis labios mi sonrisa.

Oh Dios!, cuándo llegará el momento en que pueda olvidarlo. Cuándo podré yo ser feliz sin contemplarlo. Cuándo podré, por fin, vivir lejos de él, sin que sus recuerdos atormenten mi calma.

Quítame por favor sus besos de mi piel, si es posible quita de mí todas sus caricias que recorrieron mi cuerpo, ensuciándolo con mentiras y engaños. Saca de mi vida este amor que no termina, y destruye de mi ser cada deseo de tenerlo nuevamente entre mis brazos.

Dios, si él nunca me quiso, perdóname por haberlo amado tanto, y por haber perdido largas horas de mi vida envenenándome con una ilusión que aun no acaba.
En esta noche quiero que desangre junto a mi el sueño de volver a verlo, y que el castigo de este infierno me sirva para no caer nuevamente a sus encantos.

Y ahora, junto al mar de lágrimas que acompaña mi soledad, solo me queda recibir esta dura condena, aunque duela el alma, aunque sangre mi vida, y aunque las gotas que caen de mis ojos pidan a gritos compasión (de él. Pero el no me escucha, porque él nunca me escuchó...porque para él nunca existí).

Y yo más sufro...y yo más siento que esta noche por él muero. Cada látigo de sus indiferencias y desprecios matan poco a poco la única esperanza que tenia de volver junto a él, aún sabiendo que jamás me aprenderá a querer y a amar (como yo, aun, lo quiero y lo amo a él).

Por eso, quiero que esta noche sea testigo de la muerte de un amor que no quiere morir, mas debe morir ahora, pues si no lo hace dejará empañada mi vida de amargos momentos, y de falsas ilusiones que jamas me dejarán volver a comenzar.

Viviéndonos






Pense que nunca volverías a la vida y que jamás me despertarías de mi agonía. Creí que la ilusión de sentir, de estar y de ser, era solo una utopía que imaginé en el sueño del abismo.

Muchas veces traté de no llorarte y dejar que mis lágrimas se contuvieran con los recuerdos de tus besos; pero hoy nuevamente lloro, aunque esta vez, por no entender que la felicidad de mi resurrección conlleva la angustia permanente de alcanzarla a segundos difusos de mi vida.

Aún asi te recorro con mi mirada y dibujo lentamente mi nombre en tu cuerpo. Una y otra vez desgarro con mis dedos cada rincón de tu piel, deletreandome en la profundidad de tu calor, el mismo que estampas en mi pecho.

Y ahí estás otra vez: indefenso, manso, tranquilamente mío. Derrotado por mis besos, pero vivo con mi respiro. Aquí estas, de nuevo junto a mí, tristemente buscando ser feliz; y aunque sea un segundo el tiempo que sonríes, no te importa, porque sientes que solo junto a mí eres feliz.

(Y asi continuamos descubriendonos)...

Ahora, nuevamente te detienes ante mis ojos, viéndonos solamente por la luz que irradian nuestras miradas. Y eres tú, solo tú, mi alma, mi respiro, mi aliento y mi ser. Estás. Me miras. Me hablas sin decir nada, mientras una lágrima recorre mi rostro, porque nunca fui tan feliz como en aquel instante.
¡Es increible! ser felices sin hablar, sin decir, sin hacer; solo sintiendo que estabamos ahí, en el circulo más íntimo de nuestras vidas, tratando de plasmarnos esperanza, amor, sueños y calor.

Pero, inesperadamente llegaron a nuestro encuentro las lágrimas...primero yo, que te miraba sin poder contener la emoción de mirarte; y luego tú, que llorabas porque no querías que te mirara con mis lágrimas.

Y lentamente, dibujaste en mis labios un beso, y secaste con tu aliento mis miradas. Y volvimos a mirarnos, porque no había en el mundo nada que interrumpiera nuestro destino. Solo importabas tuyyo, que ya eramos una palabra perdida en el espacio del silencio, de la emoción y del deseo que acompañaba nuestro caminar.

19 febrero, 2006

Para No Amarnos Menos

Si al dejar tu calor en mi sombra quemaras una a una las esperanzas del mañana. Si al amanecer despertaras y no pensaras que me extrañas.

Si mi mano no alcanzara tu alma al momento de mirarte. Si mi oidos no soñaran tu voz al momento de pensarte.

Si mi mirada no tocara tus labios y te besara lentamente. Si tus manos no buscaran mi cuerpo cada noche locamente.

Si las esperanzas no alimentaran nuestro camino, y si la luz del sol no alumbrara nuestro destino...

...Si todo esto ocurriera en nuestro mundo pasajero, tal vez podriamos llegar a amarnos menos...

Camino En Tu Destino

Dime hacia dónde me lleva este camino. Háblame y guía esta ruta de mi vida. Levántame de mis tropiezos y no abandones mi caminar.

Puede que, tal vez, cuando llegue a tu encuetro tu ya no estes, pero tus huellas me llevan hacia ti, alimentando el sueño de tener tus caricias.

Pero, hacia donde me lleva este camino?, explícame por favor cual es el destino de este viaje sin fin. Hacia dónde vamos? qué hay mas allá del inconciente, más allá de la ilusión, más alla de la esperanza y del dolor?...

Respondeme, por favor, y ayúdame a seguir...

De Qué Me Sirve Amarte, Ahora

Timidamente llegaste a mí. Me buscaste sin imaginarme, y me encontraste sin amarme; viviste junto a mí, pero sin sentirme; y me quisiste, pero sin quererme.

Yo por mi parte, te ame con mi cuerpo y te bese con mi alma...y me acompañé con la distancia en las noches que no estabas. Tus recuerdos me acariciaban en la obscura soledad y tu voz me daba fuerzas para volver a despertar...

Todo fue mágico, todo fue un sueño, y ahora, ya no estas...ya no te tengo, te marchaste llevándote tu felicidad, y de paso mi sonrisa...

Y si hoy dijiera que te amo, nada cambiaría, porque ya es demasiado tarde para volver a empezar. Aún así quiero que sepas que te he buscado, mas no te encuentro; es por eso que -desesperadamente-te grito hacia donde estés que te amo, aún sabiendo que no volverás...Entonces, explícame de una vez: DE QUE ME SIRVE AMARTE AHORA?...

Mi Novela: Primera Parte

Maravilloso fue el momento que viví mientras soñaba. Recuerdo que en esos días volé muy alto hasta que descubrí el paraiso terrenal, y debo confesar que nunca fui tan feliz como en aquellos días, en que la utopía de estar se convertia en realidad.
El campo, el mar, la luna y las estrellas fueron testigos de la novela del ser y no ser lo que hoy soy, y de creer y no creer en la magia que provoca nuestra historia; y entre risas y llantos, dolor y pasión fuimos interpretando los papeles escritos en la soledad de la vida, ésa que aún vivimos en soledad.
Fue tan solo ayer cuando en la puerta de la iglesia construimos la idea de marcharnos de este mundo y deambular entre el espacio de la felicidad y la espada de la realidad.

Aunque llegaste tarde-mientras que yo te esperé siglos- alcanzamos a reecontramos, a pesar de reunirnos en la segunda vida (ésa que esta antes de la muerte)...Pero nos encontramos, y desde ahí comenzamos a convivir con la esperanza del mañana y con los recuerdos del ayer; viajando a cada momento al cielo que dibujamos juntos aquel día...en el sueño de nuestras vidas.

El Espejo De Mis Lagrimas

Ya es tarde, creo que el tiempo esta empezando a correr más rapido...ya siento el frío que irradia el sol, y la luna y las estrellas van transformandose en mi unica compañía. De pronto tocan a mi puerta... sin embargo, no eres tú, sino tus recuerdos que despiertan desde la oscura soledad de la noche.

"No llores, no me llores más. Por favor no te angusties" susurras a mi oido, mientras yo me ahogo en un mar de lágrimas y junto con ellas abrazo tu alma...
Cerré los ojos fuertemente mientras sentía tu respirar. Pense que era un siglo, sin embargo, solo fue un minuto. Abrí la mirada y con ella te recorrí lentamente. Ahora tú llorabas a mi lado...cada lágrima fue el pasado y el presente sin futuro...
-"No llores, no llores más. Por favor no te angusties", le susurré rosando su rostro para secar su tristeza, no pudiendo contener su amargura.

Ese fue el día cuando comprendí que debia secar sus lagrimas con mi sonrisa, ya que su llanto era el reflejo de mi desconsuelo...